¿Es posible obtener algo de rentabilidad con la renta fija?
Lo que habitualmente se conoce por "renta fija" son productos de deuda emitidos por entidades públicas de todos los niveles (Gobierno Nacional, Autonomías, Ayuntamientos, etc.) y empresas, los cuales son vendidos a ciudadanos particulares y otras compañías a cambio del derecho de cobro de intereses a lo largo del tiempo y de recuperar el capital en un plazo dado.
En el entorno turbulento que han vivido las finanzas en los últimos años, los productos de renta fija han pasado de ser de los favoritos para aquellos inversores que quieren asumir menos riesgo a ser evitados por muchos de ellos. El motivo es que algunos países han bajado su calificación crediticia y ha surgido el miedo del inversor a sufrir una merma en el capital invertido en bonos de organismos públicos (Bonos del Estado, por ejemplo), por si esa bajada que se presupone de la capacidad de pago pudiese afectarle.
¿Queda algún producto de renta fija que ofrezca una buena relación rentabilidad/riesgo?
Lo primero que hay que tener en cuenta antes de invertir en renta fija es que con este tipo de productos la inversión está sujeta a un riesgo. Es una operación más compleja de lo que pueda parecer a primera vista, dado que el capital colocado está sujeto al riesgo de crédito (si el emisor no puede devolverlo), de mercado (el producto puede perder su atractivo para los inversores), de liquidez (pueden convertirse en papeles sin valor) y de divisa (si se compra referenciado a una moneda diferente del euro).
Hoy en día, no es un gran momento para el mercado de bonos, dada la desconfianza de muchos inversores en los bonos soberanos de muchos países. Quienes huyen del riesgo de los bonos, lo hacen en parte porque desde el BCE se ha avisado de que vienen tiempos en los que hay que saber convivir con la volatilidad de este tipo de productos de inversión. La solución para muchos está en los valores refugio, como el bono alemán o las letras del tesoro estadounidenses.
Todo lo que no sea un valor refugio, parece que hoy es una apuesta que puede salir bien, o todo lo contrario, en función de cómo vaya la economía de un país y, sobre todo, de cómo vean la capacidad de devolver el capital las agencias de calificación.
Además, hay que tener en cuenta que los bajos tipos de interés que rigen el mercado en la actualidad son la causa de la de que los productos de renta fija cuenten con rentabilidades tan bajas. Se trata de un escenario que se repetirá por lo menos hasta septiembre de 2016, fecha a partir de la cual el BCE finalizará su programa de compra de bonos y, por tanto, previsible que vuelva a subir tipos.