Consejos para conseguir trabajo en crisis
Han pasado ya casi diez años desde que allá por el mes de agosto de 2007 comenzase la crisis económica y financiera en la que todavía estamos inmersos. Un período de tiempo que ha resultado muy traumático para muchas personas que han perdido sus trabajos y que, todavía a día de hoy, siguen buscando un empleo que les sirva para satisfacer sus necesidades.
Desde luego, no es una tarea fácil. Las cifras de paro siguen siendo todavía muy elevadas, y no parece que esta situación vaya a cambiar a corto y medio plazo. Ante estas circunstancias, conseguir un trabajo en plena crisis es una carrera de obstáculos que, en la mayoría de ocasiones, acaba convirtiéndose en una auténtica quimera. Entonces, ¿qué podemos hacer? Aunque no hay soluciones sencillas, hay formas de conseguir aumentar las posibilidades para alcanzar esta meta.
Movilidad nacional e internacional
Lo más probable es que las oportunidades laborales en nuestra localidad sean escasas y, desde luego, peor remuneradas que las que podríamos obtener en otra ciudad española. Si ampliamos el área de búsqueda, accederemos a un abanico de posibilidades laborales mucho más amplia que, además, será mucho mejor para aumentar nuestra empleabilidad futura.
Si este área lo ampliamos a toda la geografía mundial, con toda probabilidad conseguiremos un trabajo antes de lo que hubiésemos imaginado. Con la crisis, son muchas las personas que se han ido del país en búsqueda de una oportunidad laboral. Pero no debemos ver esto como un problema; antes al contrario, se trata de una oportunidad muy interesante que enriquecerá nuestro currículum y nos servirá para vivir nuevas experiencias.
No siempre es fácil encontrar un trabajo de 8 a 3
A la mayoría de personas le gustaría vivir como su vecino, que trabaja sentado en una oficina de 8 a 3, con calefacción en invierno, aire acondicionado en verano y un contrato de por vida. Sin embargo, cada vez es más complicado encontrar empresas que ofrezcan estas condiciones.
En muchas ocasiones, solemos percibir los trabajos temporales, a tiempo parcial o a turnos como trabajos de peor calidad. Nada más lejos de la realidad. Existen multitud de profesionales que han conseguido un empleo estable gracias a contratos que antes tenían peores condiciones, ya que les ayudaron a ganar experiencia para encontrar trabajo en la misma empresa o en otra. Aunque en algunos casos genera bastante inestabilidad laboral, puede servir como solución transitoria y actuar como trampolín para obtener un buen empleo.
Aprovechar los trabajos estacionales
En las zonas turísticas de costa, los trabajos relacionados con el turismo se multiplican en época estival. Lo mismo sucede en la mayor parte de establecimientos durante la época navideña e, incluso, en muchos empleos agrarios cuando llega la época de la siembra y recolección. Todos ellos son trabajos estacionales, que hacen que el paro disminuya en las épocas en las que se realiza ese trabajo.
A pesar de que se trata de trabajos con contratos temporales (o, en el mejor de los casos, fijos discontinuos), en ocasiones suelen estar mejor remunerados que los contratos indefinidos. Una opción bastante interesante puede ser diseñar un calendario donde establezcamos las épocas más importantes del año y los trabajos a los que podemos acceder, de forma que estemos pendientes de las ofertas de trabajo que vayan saliendo.
Montar una empresa
Todos hemos soñado alguna vez con ser nuestro propio jefe y no tener ningún superior que nos dé órdenes. Pues bien, hay una solución para ello: hacerte autónomo o montarte tu propia empresa. El emprendedor puede autoemplearse en un negocio que realmente le guste, que le motive y con el que pueda obtener unos ingresos mayores que siendo trabajador por cuenta ajena, incluso en tiempos de crisis.
Eso sí, es necesario invertir parte de nuestros ahorros en la constitución de una sociedad, y mucho tiempo en que esté administrada y gestionada de manera correcta. Y, aun así, nadie nos garantiza de que vaya a salir bien.