Hipoteca inversa, quien tiene una casa tiene una jubilación

¿Sabías qué si al alcanzar la edad de jubilación has logrado saldar la deuda hipotecaria con tu entidad financiera y tienes una casa en propiedad, podrás darle la vuelta a la hipoteca? Sí, ¡como suena!

Es decir, podrás hacer que sea el banco el que te pague a ti una cuota mensual por tu vivienda, un montante que puede ser más que una ayuda para completar la pensión.

En eso consiste, explicado de forma muy sencilla, la hipoteca inversa; ¿Cómo funciona? Muy sencillo: el banco te ofrece una renta mensual o un pago único por el valor de tu casa, que se convierte en su garantía.

La hipoteca inversa es una forma de aprovechar el patrimonio que has acumulado a lo largo de tu vida, sin tener que vender tu casa ni dejar de vivir en ella. De esta manera puedes conseguir una jubilación plena sin necesidad de depender únicamente con el ingreso de la pensión.

 

¿Qué es una hipoteca inversa?

La hipoteca inversa es un producto financiero que ofrece una solución a las personas mayores o dependientes que necesitan complementar sus ingresos.

Consiste en un crédito o préstamo que se otorga en forma de renta mensual o un pago único, que el banco concede al propietario de una vivienda, siendo ésta garantía de dicho préstamo. De esta forma, el propietario puede obtener liquidez sin tener que vender su casa ni pagar cuotas.

Requisitos para poder contratar una hipoteca inversa:

Para poder contratar una hipoteca inversa, se deben cumplir una serie de requisitos:

  • Tener 65 años o más, o ser dependiente o tener reconocido un grado de discapacidad igual o superior al 33%.

  • Que la vivienda hipotecada haya sido tasada y asegurada contra daños.

  • Que el deudor disponga del importe del préstamo o crédito mediante disposiciones periódicas o únicas.

  • Que la deuda pueda exigirla el banco sólo cuando fallezca la persona que ha solicitado el préstamo o fallezca el último de los beneficiarios.

La principal ventaja de la hipoteca inversa es que no se pierde la titularidad de la casa, es decir, la vivienda sigue perteneciendo al propietario y puede seguir viviendo en ella hasta su fallecimiento.

Además, puede cancelar la hipoteca en cualquier momento, devolviendo la cantidad percibida hasta ese momento, y las rentas recibidas no tributan en el IRPF.

No obstante, una hipoteca inversa también tiene sus contras. La principal desventaja es que se reduce el valor de la herencia, ya que los herederos tendrán que asumir la deuda o vender la vivienda para saldarla.

La hipoteca inversa es una opción interesante para las personas que quieren mejorar su calidad de vida en la jubilación, aprovechando el valor de su vivienda. Sin embargo, se trata de un producto complejo y poco conocido, por lo que se recomienda asesorarse bien antes de contratarlo y comparar las diferentes ofertas del mercado.

 

Así funciona una hipoteca inversa

Se trata de un préstamo con garantía hipotecaria que el banco otorga al propietario de la casa una renta vitalicia o un pago único. De esta manera, el propietario puede disfrutar de su casa y recibir un dinero extra cada mes o de una sola vez.

Además, el propietario mantiene la titularidad de la vivienda y puede hacer con ella lo que quiera, como alquilarla, venderla o dejarla en herencia.

Sin embargo, hay que tener en cuenta que la cantidad que se recibe dependerá del valor de tasación de la vivienda, que suele ser inferior al valor de mercado, y que el préstamo que se concede tampoco será por el total de ese valor, sino por un porcentaje.

Asimismo, hay que tener en cuenta los gastos e impuestos asociados a la contratación de una hipoteca inversa, así como el impacto que tendrá en la herencia, ya que los herederos tendrán que asumir la deuda o renunciar a la vivienda.

 

¿Cómo me concede el banco este tipo de hipoteca?

Para que el banco conceda este tipo de hipoteca, es necesario que los solicitantes cumplan ciertos requisitos y se consideren algunos factores.

En primer lugar, el valor de tasación de la vivienda es uno de los aspectos más importantes que se tiene en cuenta para conceder la hipoteca inversa. Además, el banco también evalúa el tipo de interés, la duración del préstamo y la esperanza de vida del propietario. Cuanto más joven sea el propietario, menor será la renta que reciba, ya que se espera que viva más tiempo.



Para obtener una hipoteca inversa, otro de los requisitos es que los solicitantes deben tener al menos 65 años o ser dependientes y deben informarse adecuadamente sobre las distintas opciones que ofrecen las entidades financieras. Es importante comparar las condiciones de cada entidad para elegir la que mejor se adapte a sus necesidades y expectativas.

En conclusión, para conceder la hipoteca inversa, el banco tiene en cuenta el cumplimiento de los requisitos enumerados antes. Por ello, los solicitantes deben informarse adecuadamente sobre las distintas opciones que ofrecen las entidades financieras y comparar las condiciones de las distintas hipotecas inversas, para elegir la que mejor se adapte a sus necesidades y expectativas.