Desde el pasado 1 de febrero de 2014, las siglas SEPA (Single European Payments Area) son un símbolo común en todas las operaciones entre bancos y particulares. Gracias a esta nueva norma, todos los ciudadanos europeos pueden realizar y recibir pagos en las mismas condiciones, los mismos derechos y con las mismas obligaciones, con independencia del país en el que residan o desde el cual realicen la operación y de que las operaciones que realicen sean nacionales o transfronterizas.
Hay vida más allá de la bolsa a la hora de invertir. Sí, aunque muchos lo desconozcan, las posibilidades de inversión no se quedan en los parqués bursátiles, sino que se diversifican entre activos de lo más variopintos. Entre ellos, hay uno que cada vez gana más adeptos; se trata del vino, un caldo que no solo enamora los paladares, sino también los bolsillos.
Muchas personas tienen la idea de que la productividad del trabajo depende únicamente de trabajar muy duro, estar muy cualificados, tener una gran motivación y los incentivos correctos. Y, sí, depende de esos factores, pero no solamente de ellos. En esta entrada explicaremos otros determinantes de la productividad laboral que, no por menos conocidos, son menos importantes.
La jerga financiera suele ser, en muchos casos, difícil de entender por la mayoría de mortales. Pareciera como si los economistas estuviesen buscando constantemente conceptos y términos alejados del día a día de los ciudadanos para comunicarse entre sí y proponer soluciones complejas a los retos que plantea la economía de un país.
La crisis económica y financiera que hemos sufrido en estos últimos años ha puesto en valor un aspecto que hasta ahora muchos no le daban importancia: la importancia de la seguridad y protección de nuestras inversiones. Ahorrar no es labor sencilla, más cuándo los tipos son bajos y hay que buscar alternativas para rentabilizar nuestro esfuerzo. Por esta razón, es importante tener y conocer los mecanismos que protegen nuestro dinero.
La crisis financiera ha dejado muchos titulares y miles de personas perjudicadas por la comercialización errónea y abusiva de productos, tanto inversiones (activo) como préstamos (pasivo). Entre algunas de las causas y efectos que rodea un problema de esta índole está la falta de educación financiera. Este desconocimiento ha generado, sin duda, graves problemas, pero también ha llevado a que exista una mayor concienciación para mejorarlo.
Los riesgos y perjuicios de la especulación son bastante conocidos. Se derivan, fundamentalmente, de las pérdidas que se puedan generar (especialmente cuando estallan burbujas) y que, además, se pueden transmitir a todo el sistema financiero. Sin embargo, la especulación también tiene beneficios, como los que explicaremos en esta entrada.
Es una situación muy habitual en todas las familias españolas: se acaba el colegio y, casi sin margen de tiempo, hay que empezar a afrontar los gastos del siguiente curso. Si, por ejemplo, antes se compraban los libros de texto a finales de agosto o primeros de septiembre, ahora se reservan desde finales de junio, y son pocas las familias que lo dejan para los últimos días.
Ya sea por coste o por comodidad, los pagos en efectivo han iniciado un importante retroceso, especialmente en aquellos países con un sistema financiero y una tecnología móvil ampliamente desarrollados. Ambos aspectos, por ejemplo, confluyen en países como Dinamarca, donde más de un tercio de la población ya utiliza activamente sistemas de monederos electrónicos.