¿Qué son los bonos ligados a la inflación?
La inversión en deuda pública ha sido tradicionalmente uno de los activos de renta fija con mayor acogida entre los inversores minoritarios y los institucionales. No es un producto de renta fija más, ya que en algunas circunstancias de volatilidad de mercado e incertidumbre, se considera como un activo refugio en el que los inversores colocan sus capitales.
En los últimos años, y debido a los bajos tipos de interés que siguen rigiendo el mercado, los títulos de deuda pública han perdido parte de su atractivo en relación al interés que devengaban, que en algunos países se ha situado ya en valores negativos. Una situación que provocaba una rentabilidad real aún más negativa, si se tiene en cuenta el efecto de la inflación. Para protegerse de ello, muchos países han comenzado a emitir bonos ligados a la inflación.
Se trata de un tipo de bono que devenga un cupón fijo pero que, a lo largo de la vida del producto, incrementa el valor de la inversión en función de la evolución de un índice de referencia, que normalmente suele ser el Índice de Precios al Consumo (IPC), publicado por Eurostat. Al ser mayor el capital, también será mayor el importe del cupón a lo largo del tiempo. Generalmente, el principal tiene un suelo que impide que, ante un escenario de deflación como el actual, el capital a vencimiento se sitúe por debajo de la inversión original.
¿En qué se parecen y en qué se diferencia a un bono nominal?
Un bono ligado a la inflación se emite en las mismas condiciones que cualquier otro título de deuda pública, están sujetos a la misma legislación y a través del mismo mecanismo de subasta en su emisión. Además, también cotizan en un mercado secundario organizado, que le dotan de liquidez y le garantizan una cotización en un mercado organizado.
Sin embargo, la estructura de pagos de un bono nominal es diferente a la de un bono ligado a la inflación. Mientras el primero paga un cupón periódico fijo como porcentaje del capital invertido y devuelve el principal al vencimiento (junto con el último cupón), el segundo paga inicialmente un cupón menor que irá incrementándose al aumentar el principal en cada período para compensar el efecto de la inflación.
¿Qué países han emitido este tipo de instrumentos?
Existen varios países que emiten de manera habitual o han comenzado a emitir hace relativamente poco tiempo bonos ligados a la inflación. Así, por ejemplo, Francia, Italia y Alemania emiten bonos ligados a la inflación europea mientras que otros como Estados Unidos, Japón o Reino Unido emiten bonos ligados a la inflación doméstica.
En España, se comenzaron a emitir bonos ligados a la inflación en 2014, y se ha continuado con esta política durante algunas subastas de 2015.