Re-Emprende y otras opciones para superar el fracaso del autónomo.
Conseguir el éxito en tu primera experiencia empresarial ni es fácil ni es lo más habitual. El fracaso es inherente a toda actividad diaria, también en lo profesional. Una lección en la que se puede sacar enseñanzas muy útiles, pero que, desgraciadamente supone una losa para muchos emprendedores.
Entrar en un registro de morosos o el pago de deudas que muchas veces se avalan con el patrimonio propio del autónomo, son una rémora importante que impide que vuelva a emprender otra actividad económica. Para solventar este problema, la Administración aprobó hace unos años la segunda oportunidad, centrada en la renegociación y condonación de las deudas pasadas. Ahora, además, comunidades como la de Madrid da un paso más allá ayudando también en el momento de reemprender. Estos son los principales puntos clave.
La segunda oportunidad y las deudas pasadas
La segunda oportunidad permite que el emprendedor que haya fracasado en su actividad empresarial renegocie sus deudas con sus acreedores en un procedimiento extrajudicial de pagos en el que puede conseguir condiciones más ventajosas.
Podrá acceder a esta posibilidad cualquier empresario que sea persona física y se encuentre en situación de insolvencia, con créditos inferiores a 5 millones de euros. A través de un mediador concursal, el autónomo podrá pactar moratorias de hasta 3 años y quitas de hasta el 25% e incluso exonerar todas sus deudas si no pueden afrontarlas en un plazo de 5 años.
Una ventaja fundamental de la Ley de la Segunda Oportunidad es que todo el endeudamiento contraído hasta la fecha queda incluido en el proceso. Con esto se evita las reclamaciones judiciales que a causa de los impagos y se evitan embargos y ejecuciones contra el patrimonio del deudor.
Ayudas para reemprender
Si es vital poder solventar una difícil situación previa lo es también animar al autónomo a apostar por una actividad por cuenta propia. En este sentido, el programa Re-Emprende, de la Comunidad de Madrid, ayuda financieramente a los autónomos que hayan agotado la prestación por cese de actividad y deseen comenzar un nuevo proyecto empresarial.
El programa se divide en dos bases. En una primera se destinarán ayudas de 420 euros al mes durante seis meses, emprendas o no. Si el beneficiario de la ayuda decide volver a emprender, la segunda fase del programa ofrece ayudas de hasta 200 euros mensuales durante un año para subvencionar parte de las cuotas que los autónomos tienen que abonar dentro del Régimen correspondiente de la Seguridad Social. Lo cual te permite tener la seguridad de la cotización con unos pagos mínimos y tener margen para volver a tener ingresos.
El resultado, es que se consigue oxígeno financiero para reemprender, especialmente si se exonera de todos los pagos por deudas, a la vez que fomenta la iniciativa empresarial y crea empleo, ya que vuelve a cotizar y tener coberturas y puede contratar otros trabajadores.
